Resumen. En este escrito ahondo sobre las definiciones del concepto grupo aportadas por los alumnos.
Resumen. En este escrito ahondo sobre las definiciones del concepto grupo aportadas por los alumnos.
Palabras clave: grupo, definición de grupo, colaboración, aprendizaje mutuo, empatía.
Antes de aportar mi idea de lo que entiendo por grupo voy a exponer cómo lo definen otras personas. Sin embargo me vais a permitir que en vez de acudir a autores “consagrados”, visitemos las definiciones que aportasteis ya que creo se acercan mucho más a la realidad en la que nos estamos moviendo. Sí voy a hacer una cosa en cada definición: subrayar aquella idea que me parece le pone un acento especial.
Han sido un total de 20 respuestas que se acompañan de un dibujo. No voy a añadir más esfuerzo a mi trabajo por lo que me limito a la definición.
Si nos fijamos un poco, hay un número notable de ideas que son comunes. Por ejemplo, “objetivo, finalidad, fin, interés común” o “conjunto de personas”. Cierto que hay quien señala que desde dos…, pero parece que la idea generalizada es la de un conjunto de personas con una meta u objetivo común.
Junto a este aspecto, hay otro bloque de ideas que apelan a algo que se crea entre estas personas. Por ejemplo “comunicación e interrelación”, “dar y recibir”, “colaboración”, “aprendizaje”, “aprendizaje mutuo”, aspectos que proviene de la actividad relacional que se desarrolla entre aquel conjunto de personas. Y finalmente un tercer bloque de tipo algo más abstracto que habla de un “nosotros”, de “normas más o menos explícitas”; o algo evolutivo “puede convertirse en…”, en “cambios que se producen”, e incluso un elemento que no ha aparecido más en una persona, la idea de “enfrentamiento”.
Todo esto es muy rico e interesante porque a mi entender describen muchos aspectos de lo que podría ser un primer nivel de análisis o de descripción de eso llamado grupo. Son aspectos que podríamos definir de sociopsicológicos o al revés, psicosociológicos y que apelan a lo que el sentido común describe por grupo.
Si en un supuesto gradiente que busca profundizar un poco en este concepto pudiéramos pasar a otro nivel de análisis, quizás este se nutriría de ideas como “red”, “lazo”, “vínculo”, “confianza”. Es decir, indican algo que tiene connotaciones más interpersonales. La idea de red, por ejemplo, parece aludir a la existencia de unos lazos o vínculos afectivos que tejen una malla que contiene, recoge, sostiene y al tiempo establece conexiones. ¿De dónde viene este hecho?
Todos los estudios que se realizan desde la perspectiva en la que me muevo que es la psicoanalítica y la grupoanalítica, indican la existencia de unos lazos, de unos vínculos muy determinantes que se establecen entre la madre y su hijo. Si bien hay quien considera (Mahler, por ejemplo) que hasta los dos meses el bebé no ha desarrollado una maduración que le permita salir del aislamiento en el que se encuentra el bebé, otros consideramos que ya desde el mismo momento en el que aparece un rudimentario aparato mental, el bebé comienza a recibir señales de un exterior que para él no existe (por esto Mahler -1984-, habla de autismo primario). Pero desde esta posición la madre sí establece vínculos porque ella sí sabe que existe este ser. Y es precisamente por esta actividad de la madre que el neonato podrá establecer contactos cada vez más complejos y duraderos con el mundo exterior. La madre es pues el primer eslabón que une al bebé con la sociedad (¡ahí es nada!).
¿Y esto qué pinta aquí? En el escrito anterior creo comentar que los humanos tenemos una muy grande tendencia a regresar a posiciones anteriores a nuestro período evolutivo, y que es precisamente cuando ingresamos en un grupo, uno de esos momentos en los que se nos activan todas las vivencias que quedaron grabadas en nuestra más tierna infancia. Si lo pensamos desde este ángulo podremos considerar que en parte el propio conductor ahí está representando esa figura materna que le rescata de esa situación autística en el que se encuentra y le va a posibilitar su incorporación al grupo. Es decir, el conductor es esa figura que aparece en el grupo una de cuyas funciones va a ser la de establecer vínculos particulares con todos y cada uno de los miembros del grupo para posibilitar que, a través de estos vínculos, cada uno vaya pudiéndose relacionar, vincular con el otro. ¿Cómo?
Por no irnos a otro autor, Mahler señala que el bebé fuerza una cierta empatía a partir de las solicitudes que realiza. Pues bien, en nuestro caso, los pacientes piden de nosotros el desarrollo de esta capacidad empática (que aprendimos de nuestras madres) mediante la que vamos comprendiendo lo que les sucede desde su propia experiencia vital. O sea que el conductor, vosotros, vais a tener que ir desarrollando (no temáis, no quema) esa capacidad de empatizar, de conectar con las vivencias internas desde las que cada paciente, usuario o como le queráis llamar, actúa. En cierto modo establecemos un vínculo con todos y cada uno de los pacientes mediante el que acabamos siendo reflejo de buena parte de sus propias vivencias.
Esto va a suponer, lógicamente, que entre paciente y nosotros y entre todos en sus diversas combinaciones o constelaciones de personas y situaciones, se establece un vínculo por el que el otro depende de nosotros (en realidad es una dependencia mutua, una interdependencia). Y esta dependencia es necesaria para poder posibilitar cambios que le lleven a una progresiva autonomía (no independencia porque ésta, realmente, nunca existe)
Un saludo.
Dr. Sunyer
Los comentarios se refieren a las sesiones que he realizado con los profesionales que han acudido al curso que organizó la Diputación de Barcelona.